lunes, 14 de diciembre de 2009

Luces y sombras



Una de los subgéneros clásicos del cine de testosterona es el carcelario. Y pocas veces la industria española le había echado el ojo. Ahora, 'Celda 211' remedia este vacío con ritmo, una ambientación muy conseguida y algunas buenas interpretaciones, con especial mención para, lo han adivinado, Luis Tosar. El gallego clava su papel de Malamadre, un auténtico hijo de la gran puta, listo, peligroso y sin nada que perder.

Ahora bien, tanto la novela de Francisco Pérez Gandul como el guión de Daniel Monzón y Jorge Guerricaechevarría se enfrentan a un problema insalvable llamado verosimilitud. Para empezar, los presos denominados FIES (Ficheros Internos de Especial Seguimiento), que son las mejores joyas que habitan las cárceles, están sometidos a un régimen de seguridad que hace poco probable que se desate un motín tal como ocurre en la película.

Si no han visto la peli, igual les conviene saltarse este párrafo. Tampoco es normal que una prisión de máxima seguridad con este tipo de internos esté situada de forma que se pueda manifestar la gente en la misma puerta del centro. Pero lo que desafía ya toda lógica racional es que los funcionarios de prisiones salgan a la calle ataviados con equipo antidisturbios a zumbar a los manifestantes.

Fin del espoiler. 'Celda 211' se enfrenta al problema de la verosimilitud porque es una película española. Las circunstancias antes descritas resultan poco (o nada) creíbles en un penal de este país; en cambio, de un film made in USA uno tiende a creérselo casi todo o a no darle excesiva importancia a los elementos que chirríen. Sí, sé que no es justo, pero las cosas son así. Esc omo las letras de las canciones en inglés, que sólo ves que son una basura si dominas la lengua de Auster, a diferencia de las de los artistas de aquí.

Por otra parte, Monzón dirige con firmeza escenas de tensión muy conseguidas -esos etarras- y logra un clima general de personajes patibularios rebosante de adrenalina. En el reparto sólo flojea Vicente Romero encarnando a Tachuela, el lugarteniente de Malamadre, que parece más salido de la taberna de 'Los Serrano' que de una prisión. Y un gran hallazgo el protagonista, Alberto Ammann.

En muchos sentidos, 'Celda 211' es una muy buena película. Y supongo que los peros que he planteado anteriormente le darán bastante igual a casi todo el mundo, pero, qué le vamos a a hacer, a mí me resulta imposible desmarcarme de ellos.

Vídeo del día: 'Romance de Juan de Osuna', LOS PLANETAS

2 comentarios:

Amanda dijo...

En general no me dan igual sus peros, querido Sobrevalorado, y suscribo casi todos los que indica aquí. Incluso añadiría alguno más.

Y así como a Tachuela no le pondría peros, como hace usted, me pregunto qué hace David Selvas en esa película, y mire que tiene un papel cortito.....

Sobrevalorado dijo...

Eso no es un pero, es un lastre. Suerte que sale poco, por eso no ni le he citado. Pero está fatal, aunque me parece qu esu personaje está muy mal dibujado.