martes, 26 de mayo de 2009

Tierra, mar y aire



A 24 horas de la final de Roma, el debate es si verlo por Antena 3 -nadie dice escucharlo- o por Canal +. El tema no es baladí, ya que es muy probable que Messi marque el quinto en el Olímpico y que aquí, dado que ya es veranillo y la gente abre las ventanas, oigamos el consiguiente alborozo primero procedente de las casas donde sigan el choque por Antena 3 convencional. Dos segundos después, cantarán el chicharro los que lo sigan por Antena 3 a través de la TDT. Y que un segundo más tarde, Canal + y su señal doblemente vía satélite lleven la alegría a los hogares barcelonistas.


Por no hablar de los que llevarán el auricular dentro de la oreja y oirán a Puyal o cualquier otro de sus imitadores con la consabida fórmula "Gol de Messi, gol de Messi, gol de Messi", y los que ponen la radio -yo lo hago con el Carrusel Deportivo de la SER- a toda pastilla quitándole la voz al televisor. Sí, amigos, esto es un sinvivir...


...que por otra parte me evita hablar de fútbol en sí mismo. Todo el mundo sabe cómo juega el Barça y cómo lo hace el Man U, así que pocas sorpresas por esta parte. También parece claro quién va a jugar (bueno, lo de Sylvinho), así que debatir sobre eso sería también inútil. Y bueno,podría hacer como los periódicos de estos días, que se están hartando a jugar con la fórmula de "dos barcelonistas conversan sobre la final". Seamos serios, ¿a quién le importa lo que opine Serrat sobre la defensa adelantada o el juego aéreo?


Ay, qué poco queda.


Vídeo del día: 'Angela', JARVIS COCKER

lunes, 25 de mayo de 2009

Tropecé de nuevo con la misma piedra



Como más sabe el diablo por viejo que por diablo, nada más llegar al Sant Jordi Club, la sala anexa al recinto deportivo, pronostiqué: "Éste no sale a actuar". Lo desangelado del lugar, enorme, con apenas 200 personas me hizo verlo claro. Marc Almond, si es que en ese momento estaba en Barcelona -que tengo mis dudas al respecto- no iba a cantar por mucho festival gay que le montaran.


Ya desde el primer momento, el llamado Liberty Festival apuntaba a desastre. Desde el emplazamiento a la confección del cartel, aquello hacía aguas por todos lados. Otra cosa, más disuctible si quieren, es montar un sarao contra la homofobia y hacerlo lo más maricón posible, sin repercusión ninguna fuera del gueto gay. ¿A quién sensibilizas? ¿Al de las plataformas y el rímel?


En fin, la acreditación de prensa me libró de pasar por caja, al igual que, imagino, la casi totalidad de los asistentes. En esa tesitura, llegué un poco antes de la hora prevista para el señor Almond. En cambio, aún era sólo el arranque de la involuntariamente cómica actuación de Pedro Marín, de la que no sé ni por donde empezar.


Y yo que pensaba que un amigo mío es el peor cantante del mundo... Pues no, hay un tío aún peor; y graba discos y todo. Entre el tecnopetarda de plexiglás y el glam rock, el autor de 'Aire' -que no interpretó, qué cosas- perpetró sendas versiones de T. Rex y David Bowie por las que debería cumplir condena. Las pintas tanto de cantante como de banda eran de aúpa, pero bajo el disfraz de no sé qué que llevaba, pude distinguir que la bajista es la del Conjunto Eléctrico que acompaña habitualmente a Miqui Puig. Pobrecilla.


Y nada, a trincar condones gratis, a beber cerveza y a departir con A. y N., fieles lectoras del blog, que se unieron a X. et moi en la espera por Almond. Al rato, una voz anunció a Pastora, el nombre fuerte del cartel con la excepción del huidizo ex Soft Cell. Y salieron los vástagos de Pau Riba con otra actriz metida a cantante y ofrecieron un conciertito así mono, modernete, sin estridencias, de diseño... muy barcelonés, vamos.


Pastora no son malos. Ni buenos. Son música para la gente que no escucha música, que no quiere que la mareen, ni tener que esforzarse. ni exige demasiado. Algo resultón, que se pueda bailar y todo. En ese género, la nadería, Pastora se defienden y hasta podrían copar la radiofórmula al estilo Amaral.


Y me fui a casa -bueno, a un bar- tarareando aquello de 'tropecé de nuevo con la misma piedra' ya que es el segundo plantón que me da Marc Almond. Se salva de una buena porque me fío muy poco de la organización del tinglado este -salió una loca a decir que el cantante no había querido aguantar el retraso y se había ido, probablemente, a la sauna Casanova- y porque cuando le he visto actuar ha sido emocionante. Pero me empieza a mosquear ya el tipo.


Vídeo del día: 'Pluma pluma gay', LOS MORANCOS


PD: Estos tampoco actuaron. Ojalá.

jueves, 21 de mayo de 2009

Preferiría no hacerlo



Unas 180.000 personas acudirán al Camp Nou dentro de algo más de un mes a ver a U2 en directo. A mí que no me esperen, ya aviso. Hace muchos años que dejaron de interesarme los cuatro irlandeses, con los que he pasado etapas de fidelidad -de 'Boy' a 'The unforgettable fire'-, hartazgo -'The Joshua tree' y 'Rattle and hum'-, reenamoramiento -'Achtung baby' y 'Zooropa'- y definitiva ruptura -de 'Pop' en adelante-.


Dudaba si escribir o no un post sobre el nuevo álbum, 'No line on the horizon', que escuché entero hace un par de meses y me desagradó profundamente. De hecho, prefería no hacerlo, como Bartleby, el escribiente de Melville. Pero una anécdota reciente, relacionada con regalos de cumpleaños, me ha llevado a reescuchar con detenimiento el disco y a querer argumentar mi opinión al respecto lo más lejos posible de los prejuicios. He aquí el resultado:


- 'No line on the horizon': Un amago de canción a medio acabar que debió quedarse en una maqueta hasta saber hacia donde querían tirar. Como la tonada no arranca ni a la de tres, unas guitarras sampleadas de 'Achtung baby' tratan de insuflarle vida. En el cierre juegan a ser Radiohead.



- 'Magnificent': La mejor del lote, lo que tampoco es decir mucho en este caso. Un inicio propio de los Depeche Mode más despistados -que se podrían haber ahorrado- conduce a un tempo trotón que rompe en un clímax típicamente U2. Se copian, una vez más, a sí mismos, pero esta vez con cierta gracia.



- 'Moment of surrender': El habitual medio tiempo confesional que quiere llegar al corazón del oyente por la vía de la afectación. Sustentada sobre un tejido sonoro nada desdeñable, el estribillo bañado en gospel es de vergüenza ajena, al igual que esos coros pensados para el estadio. Con un buen arreglista y un cantante sin ínfulas, sería algo muy pero que muy diferente. Dura 7' 24".



- 'Unknown caller': The Edge juguetea con su guitarra y Bono trata de darle forma de canción. Por momentos parece que quiera ser 'Until the end of the world', pero la ampulosidad del sonido acaba por cortoircuitar cualquier atisbo de emoción. El guitarrista debería haber aprendido ya, a su edad, que menos es más.



- 'I'll go crazy if I don't go crazy tonight': Premio al título más estúpido del año. Alguien tendrá que convencerme que no es un descarte de 'Rattle and hum'. Hueca y predecible, ya que se autoplagian podrían haber elegido 'Even better than the real thing', por ejemplo, como modelo.



- 'Get on your boots': Una lamentable exhibición de músculo rockero que no debería haberse editado ni en una cara B de single. Lo peor, la sucesión de breaks patilludos que tratan de reanimar el pulso inerte de un rock de garaje de serie Z.



- 'Stand up comedy': No, no es una versión de los peores Red Hot Chili Peppers; es un mejunje funkrockero indigesto clavado al Lenny Kravitz más plomizo. Al menos, es breve.



- 'Fez-being born': Intro innecesaria, épica grandilocuente desde el primer momento, guitarras centelleantes, teclados al mando, el recuerdo de 'The unforgettable fire' en la memoria..., esperas, quieres que todo esto llegue a alguna parte, pero sólo acabas maldiciendo al tipo que grita '¡Ooohhhhh...! a la más mínima ocasión. Lástima.



- 'White as snow': Un himno adventista originalmente, al que los irlandeses han dado la vuelta como un calcetín para entregar un tema lento ajustado y sin excesos. En el debe, la letra sobre la agonía de un soldado en Afganistán hace que la canción sea más disfrutable cuanto menos inglés sepas.




-'Breathe': Por fin, U2 sonando a U2 sin caer en la autoparodia. A guitarrazo limpio, un regreso a las esencias, a 'War', a 1983. Sin ser nada del otro jueves, la pieza más agradecida del álbum.




-'Cedars of Lebanon': Empeñado en imprimir una pátina de trascedencia a todo lo que hace, el cuarteto cierra su duodécimo disco de estudio con la enésima referencia bíblica de su carrera, dando voz a un corresponsal de guerra sobre los conflictos de Oriente. Musicalmente, ambiente recogido e instrumentación contenida.



En resumen, una obra deslavazada, que empezó en manos de un productor (Rick Rubin) famoso por revitalizar carreras (Johnny Cash, Neil Diamond) eliminando lo superfluo y ha acabado en manos de Brian Eno, viejo compinche del grupo, que ha ido añadiendo capas de instrumentación a las canciones más prescindibles.


Un álbum de Elvis se llamaba '50 millones de fans no pueden estar equivocados'. Con Elvis, desde luego que no; en otros casos, me da que sí.


martes, 19 de mayo de 2009

Perdido en mi habitación



En un alarde de sillón ball, el pasado fin de semana me tragué 11 episodios de 'Perdidos' -cortesía de O.- para así cerrar la quinta temporada. He acabado de verla apenas unos días después de que terminara la tanda en EEUU, sumándose así a las hordas de jóvenes internautas que devoran sus series favoritas gracias a las descargas clandestinas de la red.


Hasta ahora no había escrito nada sobre 'Perdidos' porque resulta complicado añadir nada nuevo a lo ya dicho o escrito. Tampoco es que ahora se me hayan aparecido las musas y quiera largarles una tesis genial, pero el domingo, mientras devoraba las andanzas de Jack, Kate, Sawyer, Locke y los demás, me vino a la cabeza una cuestión.


'Perdidos' ha revolucionado la televisión como pocos productos en las últimas décadas, ha fusionado -puede que hasta deconstruido- los géneros, se ha convertido en un fenómeno global y ha dinamitado las reglas sobre la importación de contenidos en aras de la inmediatez. Vamos, que el público que devora la serie acude a internet horas después de la emisión en EEUU de cada nuevo capítulo para no perder comba respecto a los telespectadores yanquis. Se acabó lo de esperar meses y meses a que lo emita alguna cadena de pago, por no hablar de las cadenas convencionales (TVE, por cierto), que, as usual, se han lucido con esta serie en concreto.


Bien, 'Perdidos' es la leche. Creo que ha quedado claro. Ahora bien, ¿está al nivel de la Santísima Trinidad Televisiva? Sí, me refiero a 'Los Soprano', 'A dos metros bajo tierra' y 'The Wire', que vienen a ser a la pequeña pantalla lo que Di Stéfano, Pelé, Cruyff y Maradona al balompié. Repito, ¿está al máximo nivel de calidad o es sólo un entretenimiento de altura?


Y ahora, mientras los conocedores de la serie se estrujan las meninges, los profanos pueden empezar a plantearse por qué demonios no ven algo tan... adictivo. Se me ocurren decenas de motivos, pero sólo con el personaje de Hugo -y su manía de llamar 'tío' a todo el mundo- bastaría.


Vídeo del día: 'Jesus doesn't want me for a sunbeam', THE VASELINES

viernes, 15 de mayo de 2009

Himnosis



Unas apreciaciones colaterales sobre la final de Copa, básicamente extrafutbolísticas, porque del partido... ¿qué se puede decir? ¿Que defendemos fatal a balónparado? Vaya novedad.

1.- La mayoria de los asistentes al partido optó por pitar el himno nacional. Pues bueno, es una opción tan legítima como cualquier otra. Eso sí, pitar el himno de España, de Cataluña, de Eslovaquia o del Polvoritense queda feo. Estás en tu derecho, pero quedas retratado como alguien que no sabe comportarse. Allá cada uno.

2.- Censurar los pitidos tal como hizo TVE resulta patético. ¿A quién quería proteger el que ordenó el desaguisado? ¿Fue realmente el ya ex jefe de Deportes Julián Reyes? Por lo pronto, el director de la cadena, Javier Pons, ha salido raudo a dar explicaciones, lo que resulta de agradecer en estos tiempos tan de escurrir el bulto.

3.- Decía en el punto 1 que pitar era una opción legítima, pero lo que resulta cómico -o patético, no lo tengo claro- es que antes de la entrada real en el palco, unos jóvenes recorrieran el sector barcelonista del graderío instando a la gente a pitar el himno. Lo próximo será que te pongan la papeleta en el sobre.

4.- Estoy hasta los mismísimos de lo maravillosa que es la afición del Athletic y lo que ha acompañado a su equipo, y el rollo 'you'll never walk alone' que se gastan. Una cosa es que tenga mérito llegar a la final con esa banda y otra cosa que si merecían esto y lo otro.

5.- En los años 90, no consigo recordar exactamente cuando, se instauró la costumbre de mantener la celebración en el Ayuntamiento respectivo se ganase o se perdiese la final de lo que fuera. Lo voy a decir ya: es una catetada que tiene cierto sentido, por ejemplo, cuando el Alavés llegó a la final de la UEFA, pero lo del Athletic... vaya logro. Se ha cepillado a Sevilla, Sporting, Osasuna y Recreativo, menuda gesta. Tanta gabarra para portarse como unos aldeanos más.

6.- Pinto me cae de cine.



Vídeo del día: Emily Kane, ART BRUT

lunes, 11 de mayo de 2009

¡Presidente, presidente!




'You're welcome America. A final night with George W. Bush' es el espectáculo que el cómico Will Ferrell montó hace unos meses en Broadway a modo de despedida y balance de los ocho años en la Casa Blanca del peor presidente de la historia. El último show, que tuvo lugar el 15 de marzo, fue retransmitido en directo por HBO y desde el viernes puede verse en Canal +. Quien esto escribe se quedó esa noche en casa y constató que Ferrell es un comediante a la altura de los más grandes que ha habido.



Reírse cuando uno está solo es la prueba del algodón. No de que estés majara -que puede que también- sino de que lo estás viendo es realmente gracioso. En mi caso, en la recta final, tras superar una fase de semibostezos, acabé a carcajada limpia. Aclarar que soy fan de Ferrell, de Bush (como personaje cómico) y, sobre todo, de la parodia que durante años hizo el actor en 'Saturday Night Live'. El bueno, el de allí, no el desastre este que dan en Cuatro.



Les recomiendo encarecidamente que lo vean, porque es de mear y no echar gota. Sin ánimo de reventarles los chistes, les avanzo sólo algunas perlas: el cachondeo a cuenta del sonido de la 'z' en castellano que arranca con su amigo Zapatero, pasa por Vicky Cristina Barcelona, arrambla con Penélope Cruz...; la formación de la coalición que invadió Irak, con un contingente de monos enviado por Marruecos; y, sobre todo, el juego con el público en la recta final, cuando presume de su talento para poner apodos a la gente y empieza a preguntar nombre y ocupación a los espectadores para bautizarlos con un mote.



El espectáculo se estuvo representando en el Cort Theatre a precios astronómicos, entre 100 y 230 dólares aproximadamente la butaca. Más barato sale verlo por la tele, desde luego, aunque sea de pago. Por cierto, los enlaces que les he puesto del show están sin subtitular. Lo siento, es lo que hay en youtube aunque, por supuesto, Canal + lo emite en V.O. subtitulada. Otra cosa sería un crimen.


Vídeo del día: 'Going up the country', KITTY, DAISY & LEWIS

viernes, 8 de mayo de 2009

Menú indigesto




El menú de hoy -pelis vistas recientemente en pantalla de pago- resultará algo indigesto a los paladares más exquisitos. Films patrios y foráneos vienen a coincidir en que el mejor cine que se puede ver en televisión es éste.


- 'Los girasoles ciegos': Ni dos buenos actores como Javier Cámara y Maribel Verdú levantan este insoportable folletín garbancero, más visto que el TBO. Raúl Arévalo está risible como cura rijoso, pero es más culpa de ese guión maniqueo que suya. Luego se extrañan de que la gente esté harta de la Guerra Civil. No, es de pelis como ésta.



- 'Stardust': Premio al reparto más desaprovechado desde 'Esfera'. Ian McKellen, Rupert Everett, Michelle Pfeiffer, Ricky Gervais y hasta Robert de Niro desfilan en una nueva muestra de lo despistado que anda el género fantástico para niños en Hollywood. Según el director, quiso hacer "'La princesa prometida' con un toque de 'Huida a medianoche'". Para salir huyendo, sí, pero ahora mismo.



- 'American gangster': No me creo que la haya dirigido Ridley Scott, porque hace 20 años que el hombre no da pie con bola y ésta le ha salido bastente correcta. Académica, incluso. Rememorar los 70 está de moda, y la banda sonora siempre acompaña en esta historia tan del subgénero rise and fall (auge y caída) de mafiosos y traficantes. Muy ajustados Denzel Wahington, Russell Crowe y Josh Brolin.



- 'La guerra de Charlie Wilson': Desde el punto de vista USA, una película liberal. Visto desde aquí, las buenas intenciones no generan siempre buenas películas. Moraleja: como EEUU abandonó Afaganistán a su suerte después de que los afganos expulsaran a los soviéticos, los talibanes encontaron vía expedita para convertir el país en lo que ahora es: un desastre. El tono entre irónico y desmochado de la cinta les hará mucha gracia a Tom Hanks, Philip Seymour Hoffman y Julia Roberts, pero la historia se resiente.



- 'Ladrones': La cuestión de la redención por amor del ladrón no debería volver a ser tratada en el cine después de 'Pickpocket', de Bresson, pero siempre hay un tipo que piensa que las pelis que ve no las ve nadie más, con lo que su (pretendidamente) nueva mirada sobre el mismo asunto causará sensación. Pues nada, aquí tienen a Juanjo Ballesta haciendo de sí mismo y a María Valverde confirmando que es monísima. Y poco más. La vacuidad hacha celuloide.



Vídeo del día: 'Cinnamon girl', NEIL YOUNG


jueves, 7 de mayo de 2009

Toma, toma y toma




Tengo por costumbre no escribir de fútbol dos posts seguidos, pero qué diablos. Lo de anoche se merece unas cuantas reflexiones.


1.- Y el Señor dijo a los que no creían en Valdés "arrepentíos, porque no tenéis ni puta idea de fútbol". En fin, un día más en la oficina para el de L'Hospitalet.


2.- Jugó Touré Yaya de central y cumplió. Sin alharacas, pero se mostró contundente con Drogba. Sigo pensando que en partidos así es mejor no hacer inventos raros, pero... salió bien. El marfileño repetirá puesto, intuyo, en la final.


3.- Desde la lesión, Abidal no anda fino. Con su expulsión, Sylvinho tiene plaza asegurada en Roma. En la otra banda, Alves jugó su peor partido como azulgrana y enloqueció. No se fue a la calle de milagro. El único centro bueno que dio acabó en gol, por cierto.


4.- A Busquets le pudo la presión en pasajes concretos del choque. En cambio, Piqué parecía un veterano a lo Fernando Hierro.


5.- Iniesta se ha consagrado a ojos del mundo, por fin. Vaya chicharro. Y vaya tunda se llevó cortesía de los blues.


6.- A Eto'o no se le vio y Messi tuvo escasa fortuna, bien sujetado por una defensa de ayudas. Eso sí, los medios ingleses creen que es un bluff que no merece limpiarle las botas a CR7.


7.- En la previa del Plus, Alkorta y Cañizares coinciden en que el Chelsea pierde con la entrada de Essien en el once titular en detrimento de Obi Mikel. Pichi Alonso los mira con curiosidad y suelta: "A mí dadme a Essien y ya os podéis quedar con Obi Mikel". Grande, Pichi.


8.- Más de tele. En el postpartido de TV3 reunieron a Manel Fuentes (no es broma) y Antoni Bassas (el corresponsal en USA más absentista que conozco). Pero lo de mear y no echar gota fue el domingo, con el Xavi Torres y sus amigos. En vez de hablar de fútbol y arte, de espectáculo, el cuerpo les pedía, atención, protestar porque el árbitro no dio descuento con 2-6 en el marcador, y escuchar las narraciones de los goles en la SER y la COPE. Como eran para toda España, los gritos de "goool" eran similares, pero nuestro hatajo de patriotas decidió que no, que aquellas voces -en castellano, of course- expresaban la frustración mesetaria ante el resultado.


9.- Gol aparte, vaya bicho el tal Essien. Me pareció estar viendo al Desailly del 94 en el mismo partido del año pasado en Old Trafford. Por cierto, el Chelsea salió con ocho negros, Lampard, Ballack y Cech.


10.- Odio profundamente a Michael Ballack. El mejor centrocampista del mundo en 2002 se ha convertido en un leñero protestón, malcarado, que sólo sirve para ir de cabeza. Que se joda, como en la Eurocopa.


Vídeo del día: 'If I ever feel better', PHOENIX

lunes, 4 de mayo de 2009

Ji ji ja ja



Una resaca de órdago me impidió troncharme a mandíbula batiente mientras iban cayendo los goles en el Bernabéu. Por el contrario, la risa tonta que me invadió aún me dura, aunque intermitentemente. En tal estado de relajación, idiotez y laxitud mental les ofrezco el tradicional análisis del derby:


- VALDÉS: Por la tele casi no se le vio. Eso sí, Alá estuvo de su parte a la hora de atajar un casi autogol de Alves.


- CASILLAS: "Yo flipo", acertó a decir cuando el 0-3 de Ronaldinho. Yo sí que flipo con lo que paró el sábado, aunque hay que reconocer que salió a destiempo en el segundo de Henry.


- ALVES: Más concentrado en defensa de lo habitual, sabedor de que los blancos le buscarían la espalda a la mínima.


- SERGIO RAMOS: Esquizofrénico. Dado que Robben no centra, el camero trató al principio de doblarle y meter balones al área. Lo malo es que luego no encontraba a Henry por ningún lado, justo el día en que el Madrid jugó con dos estatuas por centrales.


- PIQUÉ: Estuvo imperial. Sobrio en el corte, preciso en la salida, y dinámico en ataque, lleva una segunda vuelta de impresión. El central de la selección hasta el Mundial de 2018.


- METZELDER: Pobre hombre. No juega en todo el año y encima le toca un Barça histórico con el mejor jugador del mundo de falso '9'. Ni lo vio, claro.


- PUYOL: Atolondrado en ocasiones en defensa, se redimió con un chicharro tremendo.


- CANNAVARO: Devolvió el Balón de Oro en el descanso.


- ABIDAL: Naufragó en el primer cuarto de partido. Luego, el equipo acudió al rescate y se entonó. No lo veo como central para Stanford Bridge.


- HEINZE: Jugó de lateral para atar en corto a Messi. En lugar de eso, tuvo entrada de primera fila para el baile que les dio el Barça.


- TOURÉ YAYA: Cumplidor. Guardando la posición y tirando paredes con centrales, laterales y volantes, juega más al fútbol de lo que parece.


- LASS: No se había visto en otra igual. No es que no robara el balón, que ni lo olía, es que Xavi le birló la cartera como a un juvenil. El tres contra dos en su zona le dejó hipnotizado.

- INIESTA: En su línea sublime, lo suyo ya parece hasta rutinario. La maniobra en que mandó a Lass y Gago a por tabaco y se fue por el otro lado permanece indeleble en mi retina.


- GAGO: Me pasé el choque fijándome en él. Corría, corría y corría, y nunca alcanzaba las sombras de Messi, Iniesta y Xavi.


- XAVI: Cuesta creer que el mingafría -con mucha clase, ojo- que fue durante años haya evolucionado a volante total, poniendo la pierna y pisando el área. Ahora mismo es Pirlo y Lampard a la vez. Magistral.


- MARCELO: El más desaparecido del Madrid. No recuerdo nada de él en el partido.


- ETO'O: Sacrificado por el bien común, jugó lejos de la portería y se fajó como un jabato. Valioso.


- RAÚL: Desaparecido. No le llegó ni un balón, aunque sólo necesite medio para clavar un gol. De hecho, casi lo hizo desde fuera del área en un despiste de Puyol al tirar la línea.


- MESSI: Superlativo. Guardiola lo puso de falso delantero centro para marear a los medios madridistas y desubicar a los centrales, como con Romario frente al Man U hace 15 años. Se puso las botas pese a fallar dos goles claros.


- HIGUAÍN: Este chico tiene algo. Marcó su golito e, incluso en medio del naufragio merengue, hiló alguna que otra jugada de mérito.


- HENRY: Me la envaino las veces que haga falta. Tras año y medio de vacaciones, el francés ha empezado a irse por velocidad (la primera vez, contra el Bayern) y ha ajustado la mirilla. Clase siempre ha tenido, así que a poco que físicamente aguante, miel sobre hojuelas. El Bernabéu se le da bien, por cierto.


- ROBBEN: Como un azucarillo, se disolvió al poco rato. Tuvo un buen cuarto de hora inicial, en el que desquició a Abidal y no chupó como de costumbre.


Vídeo del día: 'Caskets', DAMIEN JURADO

Como ya sabrán, estamos en mayo, mes en el que el Homo Festivalensis sale de su madriguera invernal y se despereza a la espera de patearse el Parc del Fòrum. Por ello, la selección videomusical de las próximas semanas mes ofrecerá un menú degustación con algunas de las propuestas más sabrosas del próximo Primavera Sound.