Porque, por una vez en la vida, el hype viene cargado de motivos. La nueva diva arrolló en un Apolo hasta los topes -otro soldout- con un espectáculo, más que un concierto, dinámico, moderno, elegante y festivo. La muchacha (25 primaveras) cantó como los ángeles cuando se entregó al soul más ortodoxo y arrasó cuando, junto a su huracanada banda negra, tomó la senda del funk. Tómese un poco de James Brown, espolvoree una pizca de Prince, adérecese con esencia de Erykah Badu y a triunfar por todo lo alto.
Con un sonido más orgánico, primitivo y directo que el contenido en su álbum, la Monáe lo dio todo, nos puso en órbita -no a todos, hay mucho triste entre la modernidad barcelonesa- y hasta nos sentó en el suelo a una orden suya. Dosificó los hits, aprovechó las proyecciones integrándolas en el show y nos dejó con la boca abierta en apenas 70 minutos de actuación. ¿Para qué más?
Vídeo del día: 'Cold war', JANELLE MONAE
1 comentario:
Hummm, todo el mundo habla ahora de esta chica. Empiezo a creer que me estoy perdiendo algo.
saludos
elpaseante
Publicar un comentario