Pese a este nombre tan de Alabama, el amigo Johnson es francés y ejerció de rapero hasta hace bien poco como integrante de Saïan Supa Crew, notable combo de la escena hip hop gala. Pero se conoce que debió de cansarse del chándal y descubrió que nada luce más que un buen traje. También en lo musical, porque el parisino se atreve en '74', su disco de debut, con 'Fa fa fa fa fa (sad song)' del inmortal Otis Redding y se mira en su espejo a la hora de abordar un repertorio contemporáneo pero con sabor negro sesentero.
Arropado por una banda reducida pero competente, y sobre todo, por una corista mulata de curvas rotundas y peinado imposible, Sly nos retrotrajo a los años dorados del género para, en la recta final, repescar de su pasado hiphopero sus habilidades con dos micros y un sampler.
Aplicándose en el beatboxing -ya saben, hacer ruiditos como una caja de ritmos- y programando esos sonidos en forma de loops, Johnson jugó a ser magic (si no lo escribo, reviento) con una serie de trucos que nos dejó boquiabiertos un rato. Quizás sobraron los últimos minutos de pirotecnia técnico-vocal, pero la simpatía del tipo hizo llevadero el número.
Curiosamente, pese a que formaba parte de los Caprichos, ciclo de bolos que organiza la propia sala-, la actuación registró apenas media entrada, lo que se traduce en una gran comodidad para el espectador, qué le vamos a a hacer. Con tan poca gente, lógicamente, los conocedores de la lengua de Abidal éramos tan escasos que notre ami optó por hablarnos, al igual que cantarnos, en inglés. Pas de problème.
Vídeo del día: 'I'm calling you', SLY JOHNSON
Rectificación: Como bien me ha hecho notar Nicodemo, la actuación sí estaba programada originalmente en La 2 de Apolo. Así que corrijo y entono el mea culpa.
1 comentario:
Tanto soul, tanto soul. A ver si vas a ser al final un romántico.
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