martes, 3 de julio de 2012

Ganar, ganar y ganar



Acabadas las celebraciones, acostumbrados ya al ritual de los campeones -el grito que impuso Luis, "¡Ganar, ganar y ganar!"-, un somero repaso a las actuaciones individuales en la Eurocopa.

CASILLAS: Lo de siempre. Para lo parable y lo que no lo es. Su mejor momento del torneo llegó en los penaltis ante Portugal, pero no cuando se ponía bajo los palos. Antes de los lanzamientos y en el turno de los españoles, el capitán era todo tranquilidad y transmitía una serenidad extrañamente contagiosa.

ARBELOA: Un profesional inmune a las críticas y uno de los futbolistas más inteligentes del continente. Limitado en ataque, no intenta lo que no sabe; en defensa, fue capital para controlar a Ribéry, Ronaldo y Cassano, y salvó el partido inicial con un placaje sin balón en medio campo que casi nadie vio. El italiano de la Roja.

RAMOS: Tras dos partidos iniciales atropellados, aprendió a leer los movimientos de Alba y Piqué y su rendimiento subió a lo estratosférico, a la altura de su año en el Madrid, hasta acabar merendándose a Balotelli. Sobre lo del penalti Panenka y los atributos, cabe recordar que hablamos de un tipo que le paró los pies a un veterano con galones a los tres días de llegar al Madrid. "A mí no me toques los cojones, que yo voy a estar aquí muchos años".

PIQUÉ: El titular del que menos se ha hablado durante la competición ha estado más que soberbio, perfecto, tras una temporada más que complicada. Se ha complementado a la perfección con Ramos, y, como era de esperar, dio un paso al frente a la hora de los penaltis. No en vano, la pareja más echada p'alante del fútbol mundial son los centrales de España.

JORDI ALBA: En el Valencia se tiran de los pelos por no haber cerrado el trato una semana más tarde. La revelación del torneo arrancó ante Italia con dudas y algo lastrado por el peso de la camiseta, pero en seguida se puso las pilas. Dinámico, atento y autor de un gol inolvidable en la final por mucho que la zaga azzurra se durmiera.

BUSQUETS: Capital en todo momento, maestro del corte, el apoyo y la colocación. No hace faltas innecesarias y hasta da pases de gol. El mejor del mundo en su puesto.

ALONSO: Sospechoso hasta esta Eurocopa de obstaculizar el rondo 'made in Barça' del combinado nacional, por fin ha sintonizado con Busquets y los centrales por una parte, y con Xavi por otra. La flojera de este último durante buena parte del torneo le llevó a adelantar su posición en acciones que los contrarios -véase Francia- no supieron detectar. Enterrado queda el debate del doble pivote, de momento.

XAVI: No fue tan épico como el grito de Belauste en Amberes, pero renqueante y dolido, autocrítico como nadie, el faro de la selección se echó el equipo a la espalda en la final hasta que el cuerpo aguantara. Morir matando, podría decirse. Y fue una escabechina en toda regla, la mayor carnicería vista en una final de selecciones del fútbol moderno. "Sí, hoy he sido determinante".

INIESTA: Majestuoso del primer al último día. Su actuación relevando a Xavi al mando de las operaciones frente a Portugal la recordaremos muchos años. Siempre aparece, nunca decepciona.

SILVA: Irregular. Dos momentos inolvidables en el área, cuando paró el tiempo contra los irlandeses y su cabezazo en la final, frente a lagunas físicas y de concentración de aúpa, como frente a Croacia. En cualquier caso, año a año gana en cuajo y solidez.

CESC: Otra actuación enorme que no ha sido suficientemente reconocida. Volvió a ser el de principio de termporada, apareciendo por todo el frente de ataque, tirando paredes con todo el mundo y sublimando el toco y me voy. Un caso curioso: su mejor versión siempre luce la camiseta de la selección.

TORRES: Sale muy reforzado de la Eurocopa, sobre todo de cara a la Premier, pero tampoco ha tenido una actuación que pusiera a Del Bosque en un brete. Se recordará su Bota de Oro y el ser el primero en marcar dos finales seguidas de este torneo.

NAVAS: Cumplidor. Sale para abrir el campo y sembrar dudas entre los rivales y eso hace. Atento al máximo en el gol frente a Croacia.

PEDRO: El revulsivo ideal. Llegó a junio como una moto y ha cuajado una actuación estupenda. Un balón de oxígeno para el equipo.

NEGREDO: Salió frente a Portugal para chocar con Pepe y Bruno Alves y apenas tocó bola. Tampoco fue culpa suya., desasistido frente a la tremenda presiój portuguesa.

MATA, CAZORLA y JAVI MARTÍNEZ: Tuvieron minutos anecdóticos por cortesía del seleccionador.

DEL BOSQUE: Un tipo con las ideas claras, un señor cortés y un pedazo de entrenador. Ha recompuesto un bloque fracturado, ha mantenido la tensión competitiva y cuando ha errado en la estrategia -Portugal- ha acertado con la táctica. Apostó por el falso '9' porque no vio en gran forma a ninguno de sus arietes y además reforzaba su medio campo, que no iba sobrado de vitaminas. Quizás su mayor mérito haya sido mantener siempre la cabeza fría, algo complicado dadas las críticas que comporta la vitola de campeón y favorito.

Vídeo del día: 'Summer wine', NANCY SINATRA & LEE HAZLEWOOD

2 comentarios:

batiscafo dijo...

Totalmente a favor de lo de Del Bosque. El resto, algunas cosas sí y otras no.

Anónimo dijo...

¿Por ejemplo?