El martes pasado las 6.30 de la mañana se emitió en España (Fox) el último episodio de 'House', que se ofreció en VOSE simultáneamente a su pase en EEUU y que servidor vio unas horas después porque no está tan chalado. Tras ocho temporadas, mis sensaciones se contraponen: por un lado, había que acabar con un producto que no daba más de sí y se ha hecho con tiempo, preparando un grand finale a lo largo de la última remesa de episodios con algún giro sorprendente -pero no patillero- que auguraba un capítulo final memorable.
Tristemente, la palabra que me viene a lamente tras el visionado es escapismo. Entre acabar a corte limpio, tipo 'Los Soprano' o dejarlo todo atado y bien atado, tipo 'A dos metros bajo tierra', David Shore ha optado por una opción intermedia, evasiva y poco imaginativa, muy a lo 'Perdidos'. No lo voy a destripar, pero según avanza la última entrega de la serie, el desenlace barato se va haciendo cada vez más previsible. En un alarde de escasa imaginación, además, algunos antiguos personajes regresan para poner ese toque nostálgico que aquí busca más la lágrima fácil que el guiño cómplice.
Lo mejor ha sido una alusión a 'El club de los poetas muertos' (¿lo pillan?) y escuchar por última vez la voz original de un prodigioso actor que ha mantenido en pie una serie de médicos protagonizada por un moderno Holmes gracias a su talento y a algunos de los diálogos más afilados de la historia televisiva. 'House' se ha acabado -con la canción abajo indicada- y mejor que sea así.
Tema del día: 'Enjoy yourself', GUY LOMBARDO
2 comentarios:
Ganazas de verlo y muy triste por el adiós de Greg.
Se pilló, se pilló el guiño a los poetas muertos. Y Eso que yo me olía un cierre a lo "Thema y Louise"....
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