martes, 3 de julio de 2007

Hortera de bolera


La línea editorial (je) de este blog no podía pasar por alto la macrohorterada del domingo pasado en Wembley a cuenta de la difunta Diana de Gales. Así que vamos a ello. La señora en cuestión hubiera cumplido 46 primaveras el otro día, así que sus hijos y amigos organizaron un tedioso y lacrimógeno espectáculo para recordar cuán buena, abnegada y amante de las artes era.


El marco escogido fue el nuevo estadio de Wembley, con la novedad de colocar sillas sobre el césped, a modo de platea. Así se supone que se reacaudaba más y se disimulaba el que el estadio no se llenó, como demostraban los planos amplios de televisión. Ah, el evento fue retransmitido para España por Canal +, con los comentarios intrascendentes de Àngels Barceló y las certeras pullas de Diego A. Manrique.


Y Manrique tuvo que morderse la lengua, porque lo visto fue de vergüenza ajena. Actuaron viejas glorias que o bien le gustaban a Lady Di o eran amigos suyos, pero casi nadie mostró un poco de nivel. Bryan Ferry un poquito, pero lo de Rod Stewart o, atención, Status Quo fue bochornoso. Y Elton John... bueno, con él no soy objetivo, me pone de los nervios.


Mención especial merece Tom Jones. El tío conserva la voz, pero resulta que los cirujanos plásticos hacen prácticas con él y le han dejado una cara recauchutada de lo más amorfa. Por no hablar de la ingeniería capilar. En fin, hecho un Adán está el hombre.


Mayorcete también está Roger Hodgson, el de Supertramp, que perpetró un medley con sus cancioncillas de siempre con momento hilarante incluido al no alcanzar su voz un agudo. Manolete, Manolete, si no sabes torear... Otros jovenzuelos, Duran Duran, tocaron una canción que me gustaba mucho, 'Rio', y que era una de las preferidas por la princesa. Los resucitados Take That, sin Robbie Williams -¿dónde está entonces la gracia?- también pasaron por el escenario


En cuanto a artistas jóvenes, mucho OT made in England y poca chicha. Lily Allen, Orson, Natasha Bedingfield, Pharrell Williams y poco más. ¿Les dicen poco estos nombres? Anda que a mí... Y lo peor estaba por llegar: un refrito de musicales del insportable Andrew Lloyd Webber y -por desubicado, no por malo- un número de 'El lago de los cisnes' a cargo del English National Ballet.


El público era casi más digno de verse que el show en sí. Esa idea tópica que tenemos los españoles sobre el mal gusto y la poca gracia de los ingleses volvería a cuajar sólo con emitir por televisión imágenes de los asistentes. No era el mismo público de Glastonbury, vale, pero tampoco daban ganas de zambullirse en la masa.


Y, dejando la música a un lado, merece un aparte la repulsiva operación encaminada a llevar a Diana a los altares. Porque si no es eso, no lo entiendo. Entre actuación y actuación, una persona enferma, minusválida, discapacitada o con algún otro tipo de problema contaba en un vídeo como conoció a la mamá de Harry y William, lo dulce que era, lo mucho que se preocupó, cómo rompió el protocolo, etc.


¿Es eso criticable? No. Sí lo es el levantar una hagiografía a partir de ello. Esta señora, en vez de hacer como ha hecho siempre la realeza inglesa y ponerse hasta arriba de ginebra en los salones de palacio, decidió dedicarse a la ayuda a los necesitados. Loable y digno de aplauso si no fuera porque, para el resto de consortes de las monarquías europeas, ése es su trabajo.


Si a la Reina Sofía hubiera que hacerle un homenaje musical por su sensibilidad hacia este tipo de cuestiones, el FIB empalmaría con el Festival de Otoño y éste, con el Primavera Sound. Pero todo el mundo -ella la primera- da por sentado que ése es su trabajo y ya está. En los países escandinavos ocurre algo similar, y por eso las monarquías -eso tan carente de sentido- cuentan con el apoyo de la gente.



Tema del día: 'Rio', DURAN DURAN

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Fue buenísimo.... Quiero decir horrible

Anónimo dijo...

Te has olvidado de lo mejor. David Beckham presentando, con lo bien que habla (no dista mucho en su lengua materna del español)

Sobrevalorado dijo...

Vaya, me lo perdí. Imposble verlo entero, muy largo. Por otra parte, hubo presentadoras de la tele británica -Manrique, genial, apuntó "¿son todas rubias?"- y actores desubicados como Dennis Hopper o Kiefer Sutherland.