jueves, 31 de mayo de 2007

Cursillo festivalero vol. II



Hoy es el día. Esta noche vuelve el homo festivalensis, una especie vagamente parecida al ser humano y que hiberna todo el año para desperezarse con la llegada del buen tiempo. De ahí las recomendaciones que desde estas líneas les ofrecemos, para hacer más llevadera la mutación. En el capítulo de ayer pasamos revista a andar, comer y beber, así que hoy seguiremos con cuestiones fisiológicas para mantener el tono.


Asunto obvio: si se come y se bebe, y además se pasan largas horas en un recinto, el cuerpo necesita aliviarse. En algunos festivales, este tema constituye toda una aventura, por no llamarlo suplicio. Y si usted es mujer, aún peor. Dado que la mayoría de certámenes se celebran en terrenos donde no hay nada construido, los baños portátiles alineados en extensas filas son la solución. Hay casos y casos, pero en ocasiones, un poblado amazónico resulta más salubre que lo que uno encuentra.


Excepción: el FIB y su pabellón de retretes de obra. Todo un clásico del recinto castellonense. Y una confesión. En los eventos del Fòrum barcelonés, los veteranos acceden al imponente edificio del Auditorio no para degustar las propuestas musicales que allí se ofrecen sino para pasar por sus inmaculados baños. Guarden el secreto, hagan el favor.


Siguiendo con asuntos delicados, está la cuestión de la farmacopea. Es éste un tema muy personal sobre el que no me voy extender, que cada uno es mayorcito para saber lo que tiene que hacer. Sólo apuntar que, para los que consumen más que alcohol, un festival es una excelente ocasión para solazarse siempre que sea discreto y no moleste a los demás, tanto a la hora de consumir como de gozar de los efectos.


Sobre el dress code, no hay problema: vale todo. Es decir, a la pregunta de ¿qué me pongo? la mayoría se contesta "lo más llamativo que tenga en el armario". Con lo que un festival resulta una masiva pasarela de moda en la que capturar ideas para aprovechamiento propio. Eso sí, este blog les aconseja que primen la comodidad, al igual que con el calzado. Y un bolso/mochila nunca viene mal, para guardar todo lo guardable, al igual que el móvil, con el que no escuchará nada, pero podrá comunicarse vía SMS.


Más. Aunque a veces una brújula no sea una mala idea, lo que resulta indispensable es una guía de horarios y escenarios para saber quién toca a qué hora y así poder organizarse. Así se anda menos -importante- y se reducen las esperas entre un artista y otro. Los muy profesionales aguardan como agua de mayo el día en que se hacen públicos estos datos para así planificar su festival no al minuto, pero casi. Otra opción es aprovecharse del trabajo de un amigo y seguir sus recomendaciones. Claro que luego no vale quejarse si adonde le han llevado a uno no le hace gracia.


Dicho lo cual, les avanzo mi secuencia prevista para este PS. Luego, se parecerá bien poco, que ahí entra el arte de la improvisación:


Jueves: Elvis Perkins - Alexander Tucker - Smashing Pumpkins - The White Stripes - Girl Talk.


Viernes: Billy Bragg - The Rakes - ya veremos - Sr. Chinarro - Maximo Park - Los Planetas - Hot Chip.


Sábado: The Long Blondes - Architecture in Helsinki - Patti Smith - The Good, the Bad and the Queen - Battles - Buzzcocks - Wilco - Klaxons.


Sobrevalorado necesita reponerse de tanto ajetreo, así que hasta que no acabe el PS no habrá galletas.


Tema del día: 'Ever fallen in love'. THE BUZZCOCKS


2 comentarios:

Anónimo dijo...

Venga, no repose tanto y cuente cómo fue

Anónimo dijo...

Galletas, galletas..